El amor siempre comienza con la atracción. La atracción siempre comienza con los sentidos. Comienzas el amor con una mirada, un toque o un sonido. O verás a alguien y sentirás atracción, o tendrás la experiencia de contacto físico, o te conectarás escuchando a tu amado.
Para encontrar el amor, querrás agudizar tus sentidos y crear un buen entendimiento de cómo alguien más debería amarte.