Se supone que los hombres lideran en las relaciones. Si un matrimonio está en problemas, el hombre obviamente no lidera bien. Por supuesto, nada es tan simple como esto, pero en el nivel más básico, o el hombre eligió a una chica de baja calidad que haría que su vida de casada se turbara por no conocerla lo suficientemente bien antes de contraer matrimonio *, o no está cuidando de manera adecuada su esposa. Se producen circunstancias atenuantes, como una enfermedad mental repentina y aleatoria, pero yo diría que esta es la excepción y no la regla. La verdad duele, hombres. Es hora de que comencemos a asumir la responsabilidad de cuidar nuestras acciones, palabras y los corazones de nuestras esposas.
* Nota: los matrimonios arreglados son más difíciles a esta regla