¿Realmente amaríamos a nuestro compañero de vida después de un matrimonio arreglado o tenemos que vivir con eso?

Creo firmemente que el amor es una elección. Ya sea arreglado o no, su matrimonio y las bendiciones que trae dependen de una elección. Busca intereses comunes, conoce a tu esposa. Aprende sus lenguas de amor y responde bien. Escúchala y escucha bien. Su matrimonio puede convertirse en una hermosa amistad, en la cual todos los matrimonios deben desarrollarse.

Después del matrimonio, tendrás que construir relaciones. Nutrirlo con cuidado. Protegerlo. Compartir alegría. Discutir el objetivo común. Pasen tiempo juntos, se conocen. Es como cultivar un árbol, que necesita atención ahora y ves que son frutos en el futuro.

El amor no es algo que esté disponible con tu pareja, solo debes ir a recogerlo. En cualquier relación, si la construyes, verás que el amor se desarrolla en esa relación y que el matrimonio arreglado no es diferente.

La única ventaja en un matrimonio concertado es que tendrá el apoyo y la orientación de familiares, amigos y familiares. Las experiencias son compartidas y, cuando sea necesario, puede esperar apoyo.

Sin ninguna de estas relaciones, incluso en un matrimonio concertado, la elección que tendrá será vivir con esa pareja o simplemente seguir adelante.