Tratar. Explique el escenario, cuéntele la historia. Cuéntale tus sentimientos, lo que dijiste, lo que él dijo, lo que pasó. Siéntese con una taza de té / helado / fruta y trate de hablar con ella. Dígale que quiere una conversación sin juicio, sin drama sobre algo que le está molestando.
Te sorprenderá lo práctico que pueden ser nuestras mamás asiáticas.