Se supone que el hombre es el que gana permanentemente con una barriga que marca su permanencia en el gobierno. Por lo general, la esposa siempre tiene prisa y sus tiempos, situaciones y demandas se convierten en la prioridad.
Puede ser difícil para los hombres inseguros y requiere mucha paciencia para entender los objetivos y las ambiciones de la esposa.