Dale apoyo Haz que se dé cuenta de que estás a su lado. Cuida su espalda. Mi hermano siempre estuvo allí para mí y ahora que he crecido, nos defendemos cuando es necesario.
Me hizo aprender a comprometerme, me enseñó a tener paciencia y a amar a las personas: fue un gran ejemplo. Fui cínico porque también he pasado por esos tiempos de ataque. Mi hermano siempre hizo que mi madre se diera cuenta de que merecía crecer como cualquier otro niño, y que a los hermanos nos tratarían igual. Créeme: todo lo que necesita es un hermano cariñoso, atento y solidario.