1. No debes preocuparte de que estés envejeciendo porque no es la cara inmaculada y sin arrugas de la que tu pareja está enamorada, sino TÚ.
2. Tienes una vuelta para ponerte la cabeza, mientras cuentas tus últimas respiraciones.
3. Sabes que hay alguien que está viviendo ‘Tú’ en cada respiración, incluso si te has ido.
4. Puede contarles a sus nietos las historias de sus días de juventud con su amada pareja.
- ¿Cómo seguimos siendo amigos después de romper?
- Cómo saber si una mujer realmente se preocupa por mí o simplemente está pasando el tiempo.
- ¿Cómo debo hacer que mi novia aprenda a seguir adelante si no nos casamos?
- ¿Puede enamorarse causar manía?
- ¿Por qué siento dar amor o cuidar a alguien que me siento cercano pero para ellos no sienten lo mismo? ¿Cómo debo lidiar con eso?
5. Aceptas con gracia los errores y las travesuras de tu pareja, sin enojarte por ello.
6. Ser viejos juntos es una prueba de que ser jóvenes juntos no fue un error.