Lo más pronto posible. Los fetos pueden reconocer la voz de su madre en el útero, por lo que nunca es demasiado temprano. Escuchar tu voz estimula el interés por el sonido y promueve las habilidades de escucha. Leer y hablar con su bebé es beneficioso para el desarrollo del lenguaje y las habilidades de comunicación. Además, es útil tener una rutina diaria de lectura temprana para que su bebé se acostumbre a los libros como parte del día y aprenda a disfrutarlos.
La lectura construye vocabulario y estimula la imaginación. Los bebés y los niños aprenden nuevas palabras al leer una variedad de libros y también se les puede presentar varios conceptos como números, formas, colores, etc. Mientras más palabras escuche un bebé a lo largo del día, mejor será su desarrollo.
Comienzo a leerles a mis hijos muy temprano (tan pronto como pueden mantener la cabeza erguida) como parte de nuestra rutina de siesta y de dormir. Todos ellos disfrutan del tiempo de mimos en nuestras piernas mientras les leemos antes de que se vayan a dormir. También leemos al azar a lo largo del día cuando los niños expresan interés. De hecho, nuestro hijo de 22 meses ahora entra en su habitación, saca libros de su estante de libros y nos los da a leer o se sienta a mirar las fotografías.