¡Dejala sola! Ella ya dijo que estás tratando de “empujarla hacia los sentimientos”. Has admitido “empujarla un poco”. No es así como sucede una relación sana y positiva.
Esto puede parecerle a ella como si la estuvieras manipulando, y eso es algo que nadie quiere sentir. Dale espacio, déjala en paz y deja que haga lo que tiene que hacer, sin empujar.
Y piensa en por qué continuaste presionando, incluso después de que ella mostró resistencia. Hacer esta pregunta indica que no está listo para rendirse, pero es realmente el mejor curso de acción para ambos.