El matrimonio o las relaciones románticas son muy exquisitas en comparación con cualquier otra relación, ya sea hermanos, padres, otros miembros de la familia o amigos.
Puedes amar mucho a este último, pero puede que no te gusten las ideologías, la personalidad o pasar tiempo con el otro. Se considera correcto si la relación cambia a lo largo del tiempo. Tienes la flexibilidad de alejarte silenciosamente de ellos si no te hacen feliz o por cualquier otra razón.
Mientras que en el primero, la libertad es limitada. Podrías amar a alguien y cuidar de él, pero ya no te gusta. Pero no puedes distanciarte sin admitirlo. No es una mala cosa. Pero podría ser una alerta roja para arreglar las cosas y sacar la conversación, si no es demasiado tarde.
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