¿Es posible que me volviera autista porque mi madre vivía en un área bombardeada y carecía de proteínas mientras estaba embarazada de mí?

Este estudio en el American Journal of Epidemiology asoció un mayor riesgo de tener un hijo con TEA en mujeres embarazadas que tenían una ingesta baja de ácido linoleico y ácidos grasos omega-3 (que se encuentran en peces). Los investigadores señalaron que el pequeño tamaño de la muestra hizo que nos aconsejaran tener cuidado al sacar conclusiones (50 mujeres en entrevistas detalladas de 317 madres de niños con TEA). Los investigadores plantearon la hipótesis de que las grasas poliinsaturadas podrían brindar cierta protección al desarrollo cerebral del feto. Debido al pequeño tamaño de la muestra, se requieren estudios adicionales antes de decidir que esto es un factor. Las conclusiones demasiado apresuradas de Andrew Wakefield que vinculan las vacunas con el autismo llevaron a un pánico generalizado, cuando su estudio se basó en solo 13 niños que no se tomaron muestras al azar. Sin embargo, una buena nutrición prenatal siempre es algo bueno.

Otros factores de riesgo incluyen pérdida fetal previa e hipertensión materna, proteinuria, preeclampsia e hinchazón. Los estudios de gemelos y los estudios genéticos indican un fuerte componente genético (los gemelos idénticos tienen un 60-92% de probabilidad de ser ambos autistas, mientras que los gemelos no idénticos, fraternos solo tienen un 0-10% de probabilidades de ser autistas). Sin embargo, tenga en cuenta que los gemelos idénticos no siempre tienen ambos, lo que indica que puede haber factores de riesgo o desencadenantes ambientales que “activan” el gen autista o magnifican el efecto. Aquí hay un artículo interesante sobre algunos estudios sobre si la hambruna y el estrés durante el embarazo podrían causar un aumento en las mutaciones genéticas.

Tenga cuidado al respaldar cualquier teoría sobre las causas del trastorno del espectro autista de Asperger. Hay muchas teorías por ahí, y todavía hay mucha investigación por hacer para sacar conclusiones sobre cualquier cosa. Los investigadores han indicado que puede haber cientos de genes asociados con ASD, por lo que en realidad puede haber docenas o cientos de condiciones agrupadas bajo la etiqueta “ASD”.

Puede avanzar cualquier hipótesis que desee (que por cierto no es una teoría).

Lo siguiente que debe hacer es comparar a los niños nacidos poco después del bombardeo con los niños nacidos antes del bombardeo o nacidos más de 10 meses después del bombardeo. Si observa una correlación (más autismo) en el grupo de bombardeo, acaba de comenzar el proceso científico.

Otros parámetros necesitan ser estudiados. Se deben estudiar otros bombardeos históricos para confirmar la presunta asociación.

Si entonces puede llegar a un mecanismo razonable de causa y efecto, entonces tendrá el comienzo de una teoría. Se necesitan pruebas adicionales contra otras hipótesis.

Pero comenzar con una anécdota (usted) e incluso agregar algunas anécdotas más de la misma edad (algunas otras personas autistas nacidas en el mismo período) solo permitirá inventar un nuevo “cuento de viejas”. Un “cuento de nuevas esposas”.

Lamentablemente esto pasa mucho. Ver Jenny McCarthy – Wikipedia y autismo y vacunas.