La creciente popularidad de las aplicaciones y servicios para personas que viajan por carretera hace que las personas se sientan más cómodas compartiendo servicios. También han ayudado a crear una fuerza laboral en la economía de las personas que buscan un trabajo regular y flexible. Los servicios como Airbnb con sus reseñas de usuarios bidireccionales demuestran cómo las personas pueden confiar algo extraño como su hogar a los extraños.
Estos factores, junto con la prevalencia de teléfonos móviles que pueden hacer casi cualquier cosa, han abierto el camino para una solución tecnológica. Los servicios flexibles de atención y transporte, como Zūm, satisfacen las necesidades únicas de los niños, incluidas las rigurosas revisiones de antecedentes y pequeños grupos de proveedores de atención capacitados por familia para brindar consistencia y confiabilidad.