Un buen padre es una persona que guía con el ejemplo, muestra un lado del equilibrio de ser reconfortante y educador, pero masculino. Es honesto, abierto y dispuesto a defender a su familia. Equilibra sus necesidades y sus familias, para asegurar que la familia sea lo más feliz y próspera posible. Él es el modelo de cómo amar y tratar a las mujeres. Él ofrece amor incondicional. A través de su liderazgo, él instruye y se esfuerza por hacer todo mejor que él mismo. Su mejor trabajo es pasar tiempo con su familia.
Nota: Me refiero a la esposa (mi intención no era limitar las cualidades al matrimonio), pero todo es igualmente cierto con cualquier compañero, hetero o gay casado o no.