Él pone a la familia primero, siempre. Es un hombre desinteresado, que vive para complacer a quienes más le importan. Es el tipo de hombre que puede hacer dos trabajos mientras duerme, siempre tiene un lado en mente para ganar más dinero y guarda sus ahorros con su vida. No puede descansar hasta que sepa que los que ama están bien. Se esfuerza por la perfección en el hogar y en la oficina. El equilibrio entre la vida laboral y la vida laboral es muy importante para él, pero si perder el tiempo con sus seres queridos significa una vida mejor para ellos, siempre está dispuesto a dedicar las horas extraordinarias y tomar una para el equipo. Palabras como “no”, “no se puede” e “imposible”, simplemente no están en su vocabulario, y cuando oye a otros usarlas, solo aumenta su dedicación a la tarea en cuestión.
Por qué es un buen marido: el matrimonio es el comienzo de una nueva familia; Tu familia. Ambos querrán proveer para la familia que crean juntos, y es imperativo que sean socios con los mismos objetivos en mente. Dicho esto, habrá ocasiones en que una persona simplemente no pueda hacer tanto como lo requiere el matrimonio (o la familia), tal es la vida. Casarse con un proveedor natural será una gran ventaja cuando las escalas en su consejo matrimonial, ya que inevitablemente lo harán en diferentes puntos a lo largo de su camino.
En tus momentos más débiles, su fuerza te mantiene estable y te inspira para salir adelante. No es inmune al dolor ni a la frustración, pero lo maneja bien y sabe cómo salir de los lugares bajos. Es el tipo de hombre que nunca pierde tu llamada cuando sabe que necesitas sacarte algo del pecho, o mejor, solo un amigo para que esté allí para ti. Hablando de cofres, el suyo siempre está ahí para que te apoyes, aprietes y encuentres consuelo cuando sientes que solo un abrazo lo hará.
Por qué es un buen marido: es leal, devoto y un verdadero pilar en el mundo de la mujer que ama. Esta es la receta perfecta para un esposo amoroso con la que puedes contar a través de gruesos y delgados; ¿Qué mujer no sueña con casarse con una de esas?
No hay un problema, grande o pequeño, que no tenga ganas de resolver. Es un pensador rápido y sólido, que odia que alguien lo respalde en una esquina. Él no solo ve el problema delante de él; ve una hoja de ruta de las muchas soluciones disponibles para él y se toma su tiempo para determinar la mejor manera de llegar allí, o el curso de acción que debe tomar. Él es paciente, porque tiene que apresurarse, las cosas rara vez son la respuesta y él lo sabe. Es diligente, está enfocado y se considera a sí mismo como un olímpico mental.
Por qué hace un buen marido: el matrimonio es verdaderamente hermoso, pero viene con su parte de problemas y sus parches difíciles. Los tiempos más felices no siempre están a la vuelta de la esquina: llegar allí puede requerir un plan detallado y pensar con inteligencia, no más difícil. Él será un gran jugador de equipo en los momentos en que la única manera de ganar es trabajar juntos, y confíen en mí, esos momentos pueden surgir en el matrimonio.
Cuando el mundo a su alrededor se derrumba y el sol parece que nunca volverá a salir, este hombre todavía cree: su fe es su fundamento. Lo atraviesa lo bueno y lo malo, y nunca flaquea. Él cree en las cosas que no se ven y en las que muchos abandonan cuando el mundo se vuelve frío: esperanza, moral, bondad y buena voluntad. Él tiene un hogar en la iglesia, o un pilar religioso, en su vida y la beca recarga sus motores. Él es temeroso de Dios (quienquiera que sea su Dios) y está orgulloso de sus fuertes creencias. Su brújula moral siempre gira en una dirección positiva y se niega a aceptar el fracaso. Ayuda a los demás y elige vivir su vida de una manera que cree que otros deberían vivir la suya.
Por qué es un buen marido: este hombre tiene las herramientas emocionales necesarias en su caja de herramientas para reparar muchas de las grietas y abolladuras que inevitablemente aparecerán en cualquier matrimonio. Es un luchador, y luchará contigo y por tu matrimonio. Él no se rendirá, incluso cuando lo haces.
Pasar tiempo con este hombre nunca envejece. Él cree que la vida se trata de vivir y, por lo tanto, es virtualmente inmune a las aflicciones físicas causadas por el estrés y la preocupación. No es que él no sienta esas emociones; él simplemente se niega a dejar que lo consuman. Se mantiene positivo y busca disfrutar de todos los aspectos de su vida, tanto como sea humanamente posible. Lo más probable es que haya elegido una carrera que le guste más que una que pague todas las facturas. Por lo tanto, él es tan apasionado de su trabajo como puede alimentar sus ansias de nuevas aventuras. A él le gusta viajar y lo más probable es que tenga una lista de deseos al menos un cuarto completada. No cree en perder tiempo preocupándose por lo que no puede suceder y prefiere cambiar su enfoque a lo que puede. Con él, nunca hay un momento aburrido en casa, en el dormitorio o cuando estás fuera de casa. Su luz interior brilla y calienta los espíritus de quienes lo rodean. Mantiene la vida emocionante, casi como si cada día presionara el botón de actualización.
Por qué es un buen marido: pasar el resto de tu vida con la misma persona, hacer muchas de las mismas cosas, puede ser tan aburrido o emocionante como lo haces. Casarse con este hombre garantiza que el único peligro en el que su matrimonio nunca caiga es el del aburrimiento total y absoluto. Suena simple, pero es tan importante.
Fuente: 5 tipos de hombres que hacen grandes esposos