No es realmente diferente. No siento emociones pro-sociales. No me pongo triste, ni más irritable, ni triste, ni nada de esa naturaleza, ya sea por un ciclo menstrual, o simplemente por el día a día. Es un evento, sucede, y luego se hace con.
La gente no tendrá idea de cuándo es ese momento para mí porque no tengo motivos para hablarles de ello y mi comportamiento no cambia. Sigo siendo yo, fuera de la casa tengo mi máscara, adentro sin ella, soy la misma persona que ellos conocen.