Si se toma un momento para observar todos los seres vivos que lo rodean (plantas, animales, personas), verá que todos ellos tienen un ciclo de vida. Nacimiento, crecimiento, madurez, decadencia, muerte. Ese es el ciclo.
Una abuela es alguien que alguna vez fue joven, que creció para tener hijos y cuyos hijos crecieron para tener sus propios hijos. Se necesita tiempo para que todo eso crezca, y en ese tiempo, las abuelas envejecen. Cuanto más envejecen, más se acercan al final de su ciclo de vida. Luego viene la muerte. No se puede dejar de lado, esperar, alejarse, rezar o llorar, porque es una parte natural e inmutable del ciclo de la vida.