Esto es lo que pienso:
“Bueno, eso es lindo, a esos dos jóvenes adultos se les gusta lo suficiente como para mostrarlo públicamente. Ninguno se avergüenza del otro. No les importa lo que piensen los demás porque su amor es más importante para ellos que mi opinión “¿Sabes qué? Cuando mi hija adolescente lo es, estoy muy orgullosa de ella! Ella le está diciendo al mundo “Mis sentimientos> tu ideología”. Yo diría que la crié bastante bien.