No existe tal “ley islámica”. El único requisito es que él los trate a los dos de manera justa. Si él no puede manejar eso, si insiste en pasar más o menos tiempo con su segunda esposa que contigo, entonces no debería haberse casado por segunda vez en primer lugar.
Usted hace lo que puede, pero es su problema, y él será responsable si no logra manejarlo.