¿Qué fue lo primero que te molestó de tu cónyuge, pero que te enamoraste?

Soy ateo. Mi esposo es profundamente religioso. Esto solía molestarme mucho en los primeros días. Pasé mucho tiempo tratando de que viera las cosas a mi manera.
Ahora, después de estar juntos durante 19 años, he llegado a apreciar el valor detrás de su convicción, la forma en que realiza sus rituales y ceremonias religiosas en silencio, sin pretensiones ni expectativas. Me gusta la tranquilidad, la fuerza y ​​el sentido de comunidad que sus creencias le dan.