Cómo vivir con el hecho de que eres un ‘hijo único’

De la misma manera en que vivo con el hecho de que nunca ganaré un Premio Nobel.

Solo mantén un pie delante del otro todos los días y haz lo mejor que puedas.

Y quién sabe, incluso mientras hablamos, sus padres podrían estar poniéndose manos a la obra, y para el próximo verano cambiarán los pañales.

Sólo estás inventando problemas por ti mismo.