¿Cuál es la intención de esta chica que me gusta? ¿Debo invitarla a salir?

No hay suficiente información en su descripción para inferir nada. Si el entrenador de gimnasia tiene un horario genérico que entrega a todos los que se unen al club, su presencia a su alrededor podría ser una mera coincidencia.

Tendrías que buscar más señales. Como no pareces ser un chico que ha estado cerca de la cuadra, probablemente te falte el tipo de intención para juzgar el interés del lenguaje corporal de una mujer.

Así que tu mejor apuesta es tratar de hablar con ella. Encuentra algo para iniciar una conversación con algo inocuo y relacionado con el gimnasio. Luego, deje que ella dirija la conversación (hablar de ella funcionaría bien, si es del tipo hablador). No actúes fuera del personaje ni trates de “impresionar”.

Si ya es un mes y no pasó nada, no sigas esperando y espera un golpe de suerte. Esperar que algo suceda es una estrategia pasiva y deficiente para obtener lo que desea en la vida. Toma la iniciativa y trabaja para que esto suceda.

Hmm … No, no esperes.

Simplemente inicie una conversación: “Oye, eres bastante bueno en este tema del gimnasio, ¿qué máquina te gusta más?”

La confianza proviene de la experiencia en la conversación, así que solo comience uno y juegue con él, donde sea que lo lleve; ninguna expectativa, o propósito más que compartir pensamientos sobre las máquinas, etc. Si ella también es tímida y no responde con un aluvión de palabras, entonces puede tomar la iniciativa más. Dígale que es importante trabajar el área del estómago, especialmente llenándola con comida. Y sugiérales que mañana tomen un día fuera del gimnasio y ejerciten juntos el estómago comiendo.

Si estuviera en el gimnasio contigo, te diría que vayas a hablar con ella hoy, y si no lo haces, mañana hablaré con ella y le robaré el corazón.

No, no haría eso, le diría que le gustas. Pero el punto es, ¿por qué esperar hasta mañana, qué puedes hacer hoy? A menos que sea algo como el trabajo, los impuestos o el pago de facturas … Con eso, es como por qué hacerlo hoy, si puede hacerlo mañana.

Entonces ten confianza. ¿Qué hay de ir al gimnasio si ni siquiera puedes tener las agallas para expresarte? ¡Vamos! ¿Qué tan difícil puede ser acercarse a ella y decir “Hola”? Fácil. Relajarse. Tomar una respiración profunda. Hmmm … Huuuuhh .. Está bien. Solo sé tu mismo. Quédate donde te sientas cómodo. ¡Buena suerte! 🙂