¿Era la tasa de divorcio en Estados Unidos tan alta como ahora cuando las mujeres no eran una parte importante de la fuerza laboral?

No, no lo fue. Esto se debe a que sin la capacidad de sostenerse a sí mismas, las mujeres tenían que depender de su esposo para sobrevivir. Si se divorciaban, se arriesgaban a la pobreza y al hambre.

Las personas tenían que permanecer en matrimonios infelices, aceptar el abuso, la violación o simplemente quedar atrapados subordinados a alguien que no les gustaba.

¡Gracias a Dios que en estos días, las personas no están obligadas a permanecer en matrimonios infelices!