Esto solía pasarme en mi matrimonio todo el tiempo. Esta es una táctica de manipulación muy común llamada desviación. Está diseñado para darle a la persona con la que te enfrentas una manera de cambiar el enfoque de sí mismo y lo que ha hecho a otra cosa, generalmente a ti.
Siendo una persona amable, que busca soluciones, siempre solía caer en eso, entrando en modo de defensa y tratando desesperadamente de ‘hacer que’ lo entendiera y, a menudo, olvidando por completo que tenía una queja legítima sobre la que necesito resolver.
Mira, es probable que tengas la impresión de que él está tratando de explicarte su lado para que puedas entenderlo. El no es Él ya sabe muy bien lo que quiere que haga, y está evitando activamente la resolución. Tus metas en la comunicación no son las mismas. Su objetivo principal no es encontrar una solución o ser escuchado, es ganar. Eso es. Estás discutiendo con agendas completamente diferentes. Es una distinción crucial que hacer, así que lo diré nuevamente: él sabe lo que quieres, está evitando la resolución y solo quiere GANAR.
Para combatir cuando trata de desviarte del tema y quitarle el énfasis al señalar un defecto tuyo, di esta frase:
- ¿Son las mujeres mormonas más sumisas a sus maridos?
- ¿Cómo podemos evitar que las esposas se aprovechen de su género y presenten un caso criminal inventado / falsificado / inventado contra esposos inocentes?
- ¿Cuáles son algunas de las cosas dulces que su esposo hizo por usted en la primera semana de su matrimonio?
- ¿Por qué quiero ver a mi marido dormir con otra mujer? ¿Por qué me excitan los celos?
- ¿Cómo debo ganar dinero cuando mi esposo no me permite hacer un trabajo?
“Podemos hablar de mi (defecto x), pero en este momento estamos hablando de (insertar problema)”.
Me resulta mucho más fácil permanecer enfocado en el problema real cuando digo esto. Si él dice que no, o aún trata de cambiar el enfoque hacia ti (lo cual es probable) simplemente repítelo:
“ Entiendo que le gustaría discutir (insertar un defecto) pero ahora mismo quiero discutir (insertar un problema).
Vale la pena practicar en el espejo si no estás seguro. Una vez que entienda que ya no va a ser manipulado para salir del tema o ser puesto a la defensiva, tiene muchas más posibilidades de tener una conversación productiva y mutuamente respetuosa. Enseñamos a otros cómo tratarnos. No será fácil al principio y puede que “suba la apuesta” con su presión, pero si te limitas a ello, con el tiempo, aprenderá a tratarte con el respeto que mereces, o te irás. Puede estar dejando la habitación, la casa o toda la relación. Tu decides. ¡Buena suerte!