Si bien no uso este método por mí mismo, sé que las parejas que tienen dificultades financieras tienen que mantener las finanzas separadas donde las cuentas se dividen entre las dos. Por división me refiero a algo como esto:
- Paga la hipoteca (o renta)
- Ella paga servicios públicos, comestibles, gastos misceláneos del hogar.
- Él paga por su automóvil y los gastos por él.
- Ella paga por su coche y los gastos por ello.
Tenga en cuenta que esto es solo un ejemplo de cómo se pueden dividir los gastos. La clave es que la expectativa debe ser posible basada en el ingreso y acordada mutuamente.
Esto dista mucho de ser perfecto, pero al menos permite que un “gastador” y un “ahorrador” coexistan, tal vez. Por supuesto, puede haber problemas, especialmente si uno es tan irresponsable que pone en peligro el hogar o las necesidades por no pagar las deudas.
¡Buena suerte!
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