¿Por qué se recomienda que los padres usen la escucha activa con sus hijos?

Porque no lo hacen. Esto lo tendrás que observar por ti mismo. Los anuncios de televisión son una broma.

Los padres NO se conectan muy bien con sus hijos en un nivel honesto. Es más como si encajaran en su horario para no ser considerados como un padre despreocupado. Ganarse la vida es una prioridad importante y eso lleva mucho tiempo. ¿Cuánto tiempo crees que te queda para descubrir qué significa “wa wa”? O incluso algo más complejo, como averiguar por qué la caca de los niños es púrpura … oh, gracias a Dios por jugar doh. Realmente no es tan complicado, la gente quiere tener hijos, simplemente no quieren escucharlos.

POR FAVOR … esta es mi observación y mi opinión. Ver un video sobre cómo funciona la escucha activa es una revelación real. Así que, ¡pruébalo ya!

La escucha activa les permite a los niños saber que realmente han sido escuchados, y que sus padres valoran lo que tienen que decir. Es demasiado fácil para los padres ocupados estar medio desconectados cuando sus hijos están hablando y no tener tiempo para escuchar realmente y reflexionar sobre lo que se ha dicho. Requiere más esfuerzo, pero hacer un seguimiento de las preguntas y realmente involucrar al niño en la conversación ayuda a desarrollar sus habilidades de comunicación y aumenta su confianza.

Aquí hay algunas ideas que podrías probar:

  • Sea intencional al iniciar conversaciones con su hijo, centrándose en los sentimientos en lugar de en los hechos.
  • Haga preguntas abiertas, en lugar de preguntas de sí o no. Por ejemplo, “¿Qué es lo mejor de …?” O “¿Qué es lo peor de …?” O “¿Cómo te sientes acerca de …?”

Hay límites, por supuesto. Si su adolescente se resiste a sacar la basura, no querrá entablar una larga discusión cada vez sobre sus “sentimientos”. Sin embargo, en general, sus esfuerzos por establecer una comunicación abierta con sus hijos deberían dar buenos resultados.

Es simplemente porque cuando los padres escuchan activamente, no solo escuchan sino que se enfocan más en lo que se dice. Una buena respuesta está garantizada por la escucha activa. El niño se siente comprendido.

Los niños no quieren ser escuchados, sino que buscan la atención de un buen oyente.