Si eso es lo que ella quiere y no hay complicaciones obstétricas, claro está. Las mujeres experimentan cambios en su centro de gravedad a medida que el útero crece, por lo que la estabilidad puede ser difícil. El peso adicional también puede ejercer mucha presión en los músculos de la pelvis, por lo que puede sentir dolor mientras está sentada en la silla.
Pero mientras esté cómoda, se sienta estable y no sienta dolor durante un paseo en bicicleta normal, no hay ninguna razón médica para prohibir las actividades físicas durante un embarazo normal.