No hay un marco de tiempo establecido: algunos son lo suficientemente resistentes para avanzar casi de inmediato, otros pueden tardar años en avanzar, y algunos incluso pueden necesitar la ayuda de un profesional de salud mental capacitado para enfrentar las consecuencias.
Sin embargo, todo comienza cuando uno llega a los términos de la situación (que la relación había terminado), lo acepta y libera sus pensamientos de que las cosas podrían volver a ser como eran.