Haciendo grandes cosas y actuando irresistiblemente encantador frente a esa persona. No olvide agregar un buen toque de sensualidad a su apariencia y comportamiento, ¡pero no pierda el gusto!
No hablar directamente es aún mejor: hay menos posibilidades de que arruines la impresión por actuar necesitado o decir algo estúpido.