Por las siguientes razones:
- Los prenups son una adición relativamente reciente a la jerga del matrimonio, la boda y las relaciones, y como tal, toma tiempo para que las personas, hombres y mujeres, se pongan al día con las nuevas tendencias y las conviertan en la nueva normalidad.
- La mayoría de los hombres tienen una visión rosada, poco realista e ingenua acerca del matrimonio y están cegados por el amor. Creen que la chica con la que se casan “es la única”. No pueden comprender el área donde la mujer solicita el divorcio, deja al hombre sin hogar, gana la custodia de los hijos y le pide una propiedad que ella no ganó. Sin embargo, la mitad de todos los matrimonios terminan en divorcio con mujeres que inician el 80 por ciento de todos los divorcios. Pero el amor ciega a los hombres a la lógica y las estadísticas.
- Las mujeres pueden intimidar y chantajear a los hombres para que renuncien al acuerdo prenupcial. Estas mujeres pueden amenazar a los hombres con salir, o comenzar a manipular a los hombres cuestionando su lealtad y fidelidad.
En cualquier caso, casarse sin un acuerdo prenupcial, especialmente si eres un hombre (o una mujer) con activos significativos), es una muy mala idea para empezar.