Para empezar, puedes dejar que ella decida cuándo y con quién casarse. Si ella tiene un ser querido, no debes interponerte entre ella y su amante. No puedes preparar a tu hija para su vida después del matrimonio, solo ella puede prepararse para ello. La comunicación es la clave. Hablar con ella.
Ojalá fueras el padre de mi ex novia. Quería decirle que la religión o la casta realmente no importa. Sólo les importa a los familiares a quienes les podría importar menos un día después del matrimonio. Manten una mente abierta.