De la muy pequeña muestra que usó mi esposa:
Las máquinas del hospital permitieron el uso de dos embudos de recolección, reduciendo a la mitad el tiempo de bombeo. Las bombas eran considerablemente más grandes (piense en el tamaño de la caja de zapatos en lugar del tamaño de libro de bolsillo). También tienen controles más bien manuales para la succión y la frecuencia.
Las bombas domésticas eran pequeñas, ligeras y silenciosas pero menos potentes y solo permitían un pecho a la vez. La bomba Medela tenía un programa que simulaba el patrón de succión de un bebé (alta frecuencia al inicio para arrancar las cosas y luego profunda cuando llega la decepción).