Debido a que en un matrimonio convencional, * las parejas se han comprometido a ser sexualmente exclusivas entre sí, es decir, a no tener relaciones sexuales con ninguna otra persona que no sea el cónyuge, y violar este compromiso, es decir, la infidelidad es errónea porque es una violación de la confianza del persona siendo engañada
Antes del matrimonio, o en ausencia de cualquier otra relación, no hay compromiso de exclusividad sexual, por lo que no hay ninguna restricción de tener relaciones sexuales con quienquiera con quien uno quiera tener relaciones sexuales. Por lo tanto, tener relaciones sexuales prematrimoniales no está mal.
El acto de tener relaciones sexuales con múltiples parejas no es una conducta injusta: hacerlo, a costa de incumplir un compromiso, y, en consecuencia, la confianza de su pareja sí lo es.
* Por matrimonio convencional, quiero decir “matrimonios cerrados” donde las partes no están abiertas a tener relaciones sexuales con otras personas. Los “matrimonios abiertos” se refieren a los matrimonios en los que los cónyuges con consentimiento mutuo realizan actividades sexuales con personas distintas de sus parejas.