Probablemente me convertiría en el Dictador del mundo y así salvaría a la humanidad de sí misma al crear una sociedad utópica de infinitas libertades, pero con severos castigos por los pocos crímenes que habría dejado en los libros. Eliminaré el hambre mundial, la guerra, los gobiernos, lo que sea. Pero también obligaría a cualquier persona que haya violado, asesinado o cualquier otra ofensa violenta u opresiva a ser esclavizada por el individuo o la familia contra la que cometieron el delito.
Ambos.