¿Cómo hablo con mi papá muerto?
Ella esta escuchando desde el cielo
Perdí a mi madre cuando tenía 15 años, aproximadamente 14 años atrás. Un poco de fondo:
- Yo era el niño medio con montones de inseguridades.
- Mi madre era profesora de música.
- La muerte de mi madre trastorna mi vida.
Entonces, mi querido OP, te estarás preguntando, ¿cómo puedo ayudarte? El truco es muy simple:
- Cómo convencer a mis padres y a los de mis amigos de que nos dejen mudarnos cerca de la casa de mis tíos en Tampa
- ¿Crees que ‘la paternidad francesa’ es mejor que la paternidad estadounidense o británica?
- ¿Cómo cambia la vida después de la muerte de tus padres?
- ¿Por qué es difícil aceptar madrastra / papá?
- Cómo lidiar con los padres críticos
- Ofrezca las fichas del plan: no son más que el resultado de productos de imaginación al azar (no hay ofensa para las personas que realmente lo experimentaron). Te llenan de pesimismo y crean un aura negativa.
- Dar en la cara de la compasión: Uhh Haan ! Mi madre odia verme sollozar, solía desperdiciar todo el día, y perdí el apetito seguido del concepto inútil de la vida sin sentido. Solía meditar y mirar el cielo infinito y sufrir infinitamente.
- Entregar la tarjeta de la víctima: odio admitirlo, pero con los años todos estamos “MOVE ON”. ¡Esto es controversial! Oh sí, perdí a mi madre, pero tengo derecho a seguir adelante con ese dolor. ¡Por supuesto! En tiempos de fracasos / rupturas, ‘la extraño’. Pero la extraño más cuando me gradué, gané esa beca, obtuve mi primer cheque de pago, pensé en mi alma gemela. Extraño compartir la alegría. Así que me detuve, dejé de jugar esa carta de Víctima para buscar simpatía, porque no me prestan consuelo.
Volviendo a tu pregunta, ¡Sí! Hablo con mi madre:
- Escribo sus cartas , cada vez. No importa, estoy feliz o triste. Es la carta que leyó y ella se pasa esa sonrisa. Una estrella centelleó un poco más en ese rincón del cielo azul oscuro.
- Ayudo a los necesitados en la calle , no sé que tal vez Dios la ha enviado en su forma para permitirle tener una breve reunión conmigo. Me detengo, hablo, paso una sonrisa y me siento genial al hablar con ‘mamá’.
- Adoro esos árboles y les susurro una canción, podría estar besándome en la cara con esa brisa encantadora.
Intento ser amable con el contenido de mi corazón, pero ¡hey! Solo soy un ser humano. Cometo errores, y le pido perdón. Porque no sé, tal vez ella es la que sufre en su forma.
No sé dónde está ella exactamente. Paseando por los pasillos del cielo o compartiendo su voz melodiosa en forma de un pájaro cuco.
Así que hablo con ella de todas las formas posibles, ¡sí! hay momentos en que me siento molesto, ella no responde. Pero luego hay ‘lluvias’ y me entero de que ella también me echa de menos.