Convertir a los niños en devotos de Krishna es una crianza ilustrada.
El objetivo de la vida matrimonial es producir hijos agradables, niños conscientes de Kṛṣṇa . Ese es el mejor servicio a la sociedad humana: producir buenos niños. No producen gatos y perros. Esa es mi petición. De lo contrario no producir. Permanece separado. Separar significa que no hay separación, pero no hay hijos. Esa es mi petición. Putrārthe… Pitā na sa syāj jananī sā syāt. El Bhāgavata dice: “Uno no debe ser padre, no debe ser madre, a menos que sean capaces de proteger a los niños del peligro inminente de la muerte”. ¿Qué es eso? El ciclo del nacimiento y la muerte. Si puede entrenar a sus hijos para la conciencia de Kṛṣṇa, entonces su hijo volverá a la Deidad en esta vida. Ese debe ser el objetivo. Como tratará de volver a Dios en esta vida, de igual manera, deberá hacerse cargo de sus hijos para que él también pueda regresar a Dios en esta vida. El deber de la madre y el padre debe ser que “este niño nace de mi vientre, y esta es la última fase de su vida, entrar en este vientre de cualquier animal u hombre, no más cuerpo material”. Esa debe ser la responsabilidad de padre y madre. Esa es la dirección de Bhāgavata.
(Srila Prabhupada, Fundadora-Acharya de ISKCON, Discurso en la boda de Paramananda y Satyabhama – Montreal, 22 de julio de 1968:)
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Srila Prabhupada explica en una carta.
La idea básica de criar hijos como se describe en la literatura védica es que desde el nacimiento hasta la edad de cinco años, los padres pueden ser muy indulgentes con el niño. Desde los seis a los diez años, deben reforzar la disciplina de su hijo, y desde los diez hasta los dieciséis años, los padres deben ser tan estrictos como un tigre con su hijo para que teman ser desobedientes. Luego, después del decimosexto año, los padres tratarán a su hijo como un amigo, y se le permitirá al niño desarrollar gradualmente su responsabilidad e independencia como adulto.
Por favor cuiden también de los niños. Son nuestras esperanzas futuras, y la edad de los adolescentes es la más peligrosa. Es el punto de inflexión de la vida de uno. En esta era, si cuidas a los niños, seguramente saldrán devotos conscientes de Krishna de primera clase. (Extracto de una carta escrita a Hayagriva – Londres 7 de noviembre de 1969)