La Biblia da dos razones claras para el divorcio: (1) inmoralidad sexual (Mateo 5:32; 19: 9) y (2) abandono por parte de un incrédulo (1 Corintios 7:15). Incluso en estos dos casos, sin embargo, el divorcio no se requiere ni se alienta. Lo más que se puede decir es que la inmoralidad sexual y el abandono son motivos (un subsidio) para el divorcio. La confesión, el perdón, la reconciliación y la restauración son siempre los primeros pasos. El divorcio solo debe ser visto como último recurso.
¿Cuáles son los motivos bíblicos para el divorcio?
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