¿Qué porcentaje de lesiones de clavícula (plexo braquial) en bebés recién nacidos durante el nacimiento de un niño son causadas por negligencia médica y complicaciones?

Cuando un recién nacido sufre una lesión en el plexo braquial o una clavícula fracturada (son dos cosas diferentes) durante el parto, generalmente se debe a una distocia de hombros. Una distocia de hombros es cuando nace la cabeza del bebé, pero uno o ambos hombros están atrapados en la pelvis. Es más probable que le pase a un bebé grande. La distocia de hombros es una emergencia extrema porque el cuello del bebé está comprimido y el flujo de sangre hacia y desde el cerebro está dañado, lo que significa que el bebé debe ser entregado rápidamente o puede sufrir daño cerebral o morir. Se utilizan diversas maniobras para liberar los hombros. En raras ocasiones, el bebé sufre una clavícula fracturada o un húmero fracturado debido a estas maniobras, pero son necesarias para salvar la vida del bebé. Cuando ocurre una distocia de hombros, debe pedir ayuda de inmediato (el personal de la UCIN para reanimar al bebé si es necesario, y más enfermeras y médicos en caso de que sea necesario) y continuar haciendo todas las maniobras hasta que el bebé sea entregado. Tienes que tener mucho conocimiento sobre la anatomía pélvica y fetal para entender realmente lo que está sucediendo.

Una lesión del plexo braquial se debe probablemente a un estiramiento excesivo debido a la distocia del hombro en lugar de a las maniobras utilizadas para liberar los hombros del bebé. La lesión del plexo braquial también ocurre en ausencia de distocia de hombros; puede ocurrir debido a la presión intrauterina en un bebé grande (o bebé prematuro, que puede ser más frágil), anomalías uterinas, parto prolongado o parto de nalgas. A veces sucede sin motivo aparente y sin traumatismo de nacimiento, incluso entre los bebés que nacen fácilmente por cesárea sin complicaciones ni traumas.

Algunas personas han intentado realizar estudios en un gran número de mujeres embarazadas para ver si la realización de más cesáreas, para cualquier bebé que se sospeche que es grande, prevendrá la distocia de hombros. Sin embargo, hacer cesáreas para estos bebés no reduce la incidencia de distocia de hombros o lesiones en el parto. Esto se debe en parte a que muchos bebés grandes nacen sin dificultad, y en parte porque es difícil estimar con precisión el peso fetal al final del embarazo (las mediciones de ultrasonido bien realizadas pueden estimar una libra entera equivocada en cualquier dirección).