Voy a asumir que eres una mujer aquí. Si no lo eres, bueno, me temo que no puedo ayudar mucho /:
Por lo tanto, tiene razón acerca de que los anillos son un signo de propiedad, lo son, o al menos lo son. Excepto que solo es el caso cuando la mujer es la que lo lleva. Para un hombre no hace ninguna diferencia, porque los hombres nunca fueron vistos históricamente como propiedad de las mujeres, y dado que, hasta la fecha, la mayoría de las mujeres todavía toman el apellido de su esposo en Occidente, las mujeres todavía son consideradas como propiedad de una hombre. Sin embargo, lo inverso ocurre. Solo piensa en cuántos hombres engañan a sus esposas, independientemente del anillo.
Además, en una nota, el príncipe Guillermo no usa un anillo de bodas, pero Kate Middleton lo hace. Te dejaré decidir qué significa esto para ti.
En los otros puntos: si la gente ya sabe que está casado, no tiene sentido decirlo. En la misma nota, es un poco extraño conocer gente nueva y decir “Estoy casado” con ellos, si el tema no aparece. Sin embargo, lo que me preocupa es evitar deliberadamente mencionar que está casado, es decir, si está contando una historia que los involucra a los dos y deja de lado su nombre / estatus como su esposa. O si una mujer se coquetea con él, sin darse cuenta de que se lo han tomado, y él no (o se atasca al hacerlo) divulga la información.
Esa fue la parte racional de mi respuesta. En la parte romántica, de hecho voy a decir que creo que es más romántico no usar un anillo, porque entonces es una especie de “responsabilidad tuya” ser responsable de tus acciones. No hay anillo, ni símbolo, para evitar que las personas te hablen, por lo que depende de ti, tu compromiso y tu moral decidir qué hacer. También me gusta la idea de mantener una parte de tu amor “oculta”, si eso tiene sentido. Algo solo para ustedes dos. (Quizás por eso me gusta tanto la idea de fugarme).
Ahora depende de ti elegir cuál crees que se aplica a ti, jajaja
Ah, y respondiendo a la pregunta: sí, me casaría con un hombre sin anillo de bodas, siempre que se hiciera por romanticismo y no por falsas simetrías de poder.