Una buena respuesta a esa pregunta es que no debes casarte con la persona con la que puedas imaginarte pasar el resto de tu vida, sino con la que no puedes imaginarte que no pasarás el resto de tu vida.
Pero creo que esta es la respuesta absoluta: puede seguir adelante y casarse cuando los dos no pueden pensar en una sola cosa que cambiaría si lo hiciera . Siempre que haya algo que piense que sería diferente si estuviera casado, trabaje en eso primero.