¿Está llamando a su hija una “princesa” un síntoma de megalomanía delirante?

No hay nada malo con “princesa” y no creo que necesites preocuparte por la megalomanía delirante.

Ese tipo de problema solo ocurriría si criaras a tu hija para creer lo siguiente:

  • ella es mejor que todos los demas
  • ella siempre puede confiar en su padre para darle un tratamiento / protección especial
  • ella no necesita ser autosuficiente ni siquiera responsable porque puede escapar con el asesinato; después de todo, ¡ella es una princesa!
  • ella siempre obtiene lo que quiere

Como vemos, los problemas podrían ocurrir si se le hace creer que está por encima de todos los demás. Ella tiene derecho n todos los sentidos de la palabra.

Si es solo un término de cariño, está bien. Los problemas surgen cuando el término “princesa” significa privilegio y exención de los dolores de crecer y aprender algunas habilidades para la vida. Incluso Sócrates fue consciente de esto cuando dijo:

“Los niños ahora aman el lujo. Tienen malos modales, desprecio por la autoridad; muestran una falta de respeto por los ancianos y aman las conversaciones en lugar del ejercicio “. – Sócrates

Hay un artículo útil sobre cómo evitar criar niños con derecho en la publicación del blog aquí.

Cómo dejar de criar niños titulados con 8 técnicas inteligentes – Blog de Problem Kids

Estás leyendo demasiado en una palabra. Para un niño, una princesa es más como un hada o unicornio. Una princesa es una persona de cuentos de hadas. Cuando hay princesas en las historias suelen ser el personaje principal. Si hay reyes y reinas, usualmente están en el fondo.

Las princesas son gente de fantasía. Algunas personas en fantasías montan dragones. Algunos se visten con armadura. Algunos tienen sirvientes que les ayudan a disfrazarse para asistir a las pelotas. Hay muy poco sentido de que los roles de fantasía se relacionen con los reales, incluso si el niño era consciente de cómo viven las monarcas reales.

Nunca he oído hablar de un padre que use el mundo en otra cosa que no sea un sentido de fantasía.

A los ojos de un padre, su (s) hija (s) siempre será una “princesa”, que es un término de cariño y no de “criarla”.

Si crían al niño para que se eche a perder y tenga derecho, hasta el punto en que ella relaciona a “princesa” como algo más que eso, es otro tema.

En muchos contextos, “princesa” no es un término agradable, es un insulto.

Pero en lo que respecta a los padres / hijas … es como llamar a su hija, “Cariño” o “Cariño”.