La Iglesia confía en las oraciones humildes y escrutadoras de sus miembros para guiarlos hacia los pasos más adecuados para ellos en esta situación. En la mayoría de los casos, los científicos cristianos abordan los problemas relacionados con su cuerpo y su salud con la oración en lugar de buscar soluciones médicas.
Las mujeres y los hombres que enfrentan una decisión tan difícil merecen compasión y apoyo. Para la sociedad en su conjunto, la tragedia de tantos embarazos no deseados fuera del matrimonio puede indicar la necesidad de una aceptación más profunda de los preceptos morales que protegen la felicidad humana y estabilizan la sociedad. Los científicos cristianos tienen una profunda convicción de que cuanto más entendemos que la vida es totalmente espiritual, más encontraremos respuestas curativas a los problemas personales y sociales más desafiantes, incluido este.