Creo que todos tuvieron un spar con sus padres en un momento u otro.
La gravedad de que los padres les denuncie varía, y también lo es la influencia de eso en los pensamientos y acciones futuros.
Algunas personas logran avanzar bien, otras pueden detenerse en el drama años más tarde.
Si es lo primero, no hay nada de qué hablar. Si es lo último, la persona necesita buscar ayuda profesional: actuar de una manera peculiar años después de un altercado verbal no es una forma saludable de ser.