¿Cuál es la mejor manera de ayudar a mi niño cuando se interesa más en el alfabeto y las palabras?

Respaldaré lo que otros han dicho: mientras más niños estén inmersos en el uso del lenguaje, tanto oral como escrito, más competencia obtendrán con el tiempo. Hay montañas de investigación para apoyar esa conclusión, y es cierto para los bebés, niños pequeños, niños en edad preescolar, hasta la edad adulta y más allá. (También es cierto para aprender cualquier tipo de sistema de signos, por cierto: lenguajes informáticos, idiomas distintos del inglés, lenguajes visuales, sistemas numéricos, etc.)

La respuesta corta es que cuanto más nos sumergimos en los usos diarios de cualquier idioma o sistema de señas, mejor aprendemos. Se trata de la coherencia y la adición del uso del lenguaje (y el uso del meta-lenguaje, discusiones de lo que significan las cosas, su significado, etc.) en la mayor cantidad posible de contextos de la vida cotidiana. Entonces, si hace hincapié en los números y cuenta y piensa en cómo funcionan los sistemas de números, o si hace hincapié en los sistemas de letras y los sonidos y formas de las letras y cómo funcionan, su hijo estará más inmerso y, por lo tanto, aprenderá mejor. Eso es lo que muestra la investigación, de todos modos.

Sin embargo, advierto contra cualquier sistema comercial empaquetado en particular. Deben ser vistos como útiles pero limitados: herramientas en una caja de herramientas. Claro, pueden ayudar hasta cierto punto, pero deben combinarse con muchas otras herramientas para ayudar a los niños a desarrollar su propio conocimiento y experiencia de trabajo con el idioma. Pero no ayudan más que cualquier otra cosa.

Sobre todo, estas cosas ayudan mejor:

  1. Deje que sus hijos lo vean leer y escribir con regularidad, con herramientas de composición tanto analógicas como digitales.
  2. Dales una práctica regular y consistente haciendo lo mismo.
  3. Fomente el punto de vista de que el uso del lenguaje (lectura, escritura y comunicación oral) es una EXPERIENCIA SOCIAL, no necesariamente solitaria. Claro, * puede * ser solitario, y hay muchas veces en que debería serlo. Pero en última instancia, usamos el lenguaje y damos sentido a contextos socialmente situados que nos ayudan a determinar por qué y cómo significan las cosas. Aprender qué es el “café”, por ejemplo, es solo una parte del proceso. Saber si debe comprar una escoba o un trapeador cuando alguien dice “Derramé el café” es un problema contextual, que proviene de ver el lenguaje y el uso del lenguaje como algo que se aprende socialmente a lo largo del tiempo.

Otra sugerencia:
Se tonto.

Maquillaje de rimas espontáneas;
A es para manzana,
B es por error,
C es para cutie (mientras se pellizca la nariz)
Y necesito un abrazo!

Hacer cartas con su masa para panqueques o tostadas.
Hable acerca de lo que esa letra es ‘para’.

Haz letras con los dedos y busca cosas que comiencen con esa letra.

Pregúntele con qué letra comienza su nombre y luego enumere otras palabras que comiencen con esa letra.
Haz lo mismo para ti y para papá y hermanos.

La sopa de letras y los cereales son muy divertidos.

La idea es hacer que el reconocimiento de letras se transfiera de libros y etiquetas impresas y letreros a imágenes en su mente cuando escuche sonidos que se relacionan con esas letras. Este es el primer paso para la fonética y la lectura real.

Alentar su interés. Tenemos un rompecabezas infantil con las letras y cuando los niños las sacan o las ponen, decimos la carta. Mientras espera en el consultorio del médico, haga un juego para encontrar letras en las revistas o en un libro. Tenemos una serie que mi Moncure llama Little (inserte la letra). Cada letra tiene su propio libro y el niño pasa por descubrir cosas que comienzan con esa letra.

Cuando los niños señalan una palabra en un libro o una revista, se la leen. También utilizamos videos largos para cantar en los que las palabras aparecían en la parte inferior de la pantalla y vimos programas como Between the Lions que se enfocan en el lenguaje.

Fomentar el uso de palabras reales. No requiere perfección, pero tampoco responda a gruñidos. Habla con ellos, léeles.

Como dice el Usuario, con énfasis y precisión, la manera más importante de fomentar la facilidad con el lenguaje es leerle a su hijo. Cuanto más, mejor. Léale a su hijo, hable con él o ella, usando palabras reales, no tonterías. El gran volumen de palabras habladas en su hogar tiene un profundo impacto en la alfabetización de sus hijos (fuente: The 32-Million Word Gap). Exponer a su hijo a los ritmos del lenguaje es clave.

Una herramienta útil para ayudar a los niños a aprender el alfabeto es uno de esos conjuntos de letras magnéticas y un pequeño dispositivo, también magnético, que los pronuncia cuando se colocan en él. Leapfrog hace uno. Otros pueden, también. Pon uno de esos en tu nevera:

Amazon.com: LeapFrog Letter Factory Fonética y números: Juguetes y juegos

Además, las letras de espuma para la bañera, del tipo que puede mojarse y pegarse a un lado de la bañera, hacen que la hora del baño sea un momento de aprendizaje, familiarice a sus hijos, de manera táctil, con las formas, y le dé la oportunidad de Ayúdelos a deletrear su nombre y palabras simples, o aprenda los órdenes de números y letras. ¡Buen material!

Amazon.com: Little Tikes Bath Letras y números: Juguetes y juegos

En general, cuanto más hagan las letras y las palabras parte del entorno, más se familiarizará con su hijo.