Si el niño por nacer pone en peligro la vida de la madre, ya sea directamente o impidiéndole que reciba tratamiento médico (como la quimioterapia), la ley judía requeriría un aborto terapéutico.
En todos los demás casos, es complicado y debe consultar con su rabino. Definitivamente hay casos en los que estaría prohibido, y algunos en los que estaría permitido, dependiendo de una serie de factores.